El unicornio
Carolina (Ana de Armas) desconfía de Amelia (Marta Hazas) más que nunca después de haberla visto llegar al internado junto a Noiret a altas horas de la noche. Sabe que ninguno de sus compañeros la cree, así que intentará obtener las pruebas que necesita tendiéndole una trampa a la profesora. También Julia (Blanca Suárez) ha decidido emprender su propia investigación. Está segura de que la llave que encontraron en la habitación de Lucas (Javier Zidoucha) servirá para abrir la caja fuerte de su padre y piensa comprobarlo por sí misma. Camilo, que sorprende a Julia escapándose del colegio, decide seguirla.
Lucas (Javier Zidoucha) por fin le confiesa a su padre lo que le atormenta por las noches: en su pesadilla puede verle a él matando a una persona con un destornillador. Además, sabe perfectamente a quién pertenece ese destornillador, es el de Toni (Alejandro Casaseca). Afortunadamente, hoy Lucas (Javier Zidoucha) ha soñado algo diferente: que un unicornio chocaba con Héctor (Luis Merlo). Lo sorprendente es que ése también era un sueño de los que se cumplen. Mientras tanto, Toni (Alejandro Casaseca) tiene sus propias preocupaciones. Se ha dado cuenta de que Noiret ha intentado jugársela dándole sólo la mitad del dinero que exigió a cambio de los papeles.
Elsa (Natalia Millán) está desbordada, le cuesta compaginar su labor como directora del centro con su nuevo papel de madre. No quiere cogerse una baja de maternidad pero tampoco que Noiret le eche una mano dados sus antecedentes de maltrato. Harta de la situación, ha regañado a Evelyn y Paula (Carlota García) más de la cuenta, cuando trataban de dar al bebé leche de una botella. Las pequeñas, que no comprenden el enfado de Elsa (Natalia Millán) , se convencerán de que ha robado al niño a sus papás de verdad y ellas deben devolvérselo.